Beatriz y otras personas!

Hoy vuelvo a subir a mi trastero y encuentro un pensamiento que me inspira alguien a quien conocí hace aproximadamente 15 años, alguien que me acompañó en un intenso “camino de Emaús” y que hoy me escribe en mi muro del Facebook preguntándome por qué no escribo (si hace 15 años alguien nos hablara del muro de Facebook pensaríamos en un relato de ciencia ficción del grandísimo Isaac Asimov)
Mi querida Bea, no escribo porque hay algo que me lo impide, ese algo soy yo misma, he decidido entregarme a lo inmediato y me olvido poco a poco de lo esencial. Me paso el día hablando de la importancia del autococimiento y la toma de consciencia de uno mismo como punto de partida para una vida más plena, y yo, la predicadora me olvido de hacer el sano ejercicio de estar conmigo misma un ratito al día. Pero gracias a ti, que me has llamado la atención y gracias a Marta que, hoy mismo, me ha enviado el mismo mensaje me pongo a escribir para decir por qué no escribo. Podría poner como excusa la fugacidad de la vida, el ritmo del trabajo, las distancias en Madrid… podría poner excusas elocuentes y extravagantes, pero sólo hay un motivo, yo misma. Porque soy yo la que sale y entra, la que se entrega cada día al frenético ritmo que nosotros nos marcamos, parece que si no hacemos más de 50 cosas al día no hemos hecho nada… parece que si no estamos todo el día cruzándonos mails no estamos haciendo nada… tenemos tanto miedo a no hacer que nos olvidamos de ser!! Desde este instante quiero dedicar más tiempo a las personas y más intensidad a las relaciones, quiero tomarme más en serio para tomar más en serio a los que me rodean, porque pasan los días y me voy acomodando en las tareas y pierdo el foco en lo profundo y en lo bello.
Comparto este pensamiento para hacer consciente de mí misma y comprometerme más con las personas que me rodean.
Gracias por recordarme que puedo compartirme un poco más.

Comentarios

  1. María ¿ha caducado tu blog? ¿cómo estás? espero que todo bien, nueva vida, nuevo trabajo, nueva casa... ¿te has olvidado de los viejos amigos? No sé para que quieres un blog si no lo usas

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

El Zonte

Orgullo del orgullo

Cartas a Mateo (I)